Raleigh.- El gobernador Roy Cooper escuchó las desmandas de la comunidad y vetó el miércoles el proyecto de ley antiinmigrante HB 370, horas después que el documento llegara a su escritorio.
"Esta legislación se trata simplemente de ganar puntos políticos partidistas y utilizar el miedo para dividir Carolina del Norte. Sé que la ley actual permite que el estado cárcel y procesar a los criminales peligrosos, independientemente de su estado migratorio", escribió en un comunicado.
"Este proyecto de ley además, de ser inconstitucional, debilita aplicación de la ley en Carolina del Norte al ordenar alguaciles para hacer el trabajo de los agentes federales, el uso de los recursos locales que podrían perjudicar su capacidad para proteger sus condados. Por último, para elevar su complacencia política partidista, la Legislatura al violación de los derechos del alguacil que puede resultar en su destitución".
Tras la decisión del gobernador la HB 370 regresará a la Cámara de Representantes donde para anular el veto los republicanos requieren de 3/5 de los votos (30 en el senado y 72 en la Cámara de Representantes).
"Para que se muera la HB 370 necesitamos sostener el veto del gobernador. La Legislatura tiene el poder de anular ese veto y lo tratará de hacer en la Cámara donde surgió el proyecto que en este caso es la Cámara de Representantes", explicó a Qué Pasa Moisés Serrano, Director de Política de El Pueblo. "Ncesitamos 50 votos para sostener el veto del gobernador. Ayer en la Cámara vimos que tenemos 53".
El camino que tómo la HB370
