Winston-Salem.- Varios miembros de la Guardia Nacional empezaron el lunes a vacunar a los residentes del condado de Forsyth que estos días están adquiriendo las dosis contra el COVID-19.
La llegada de 12 miembros de la Guardia Nacional al Departamento de Salud Pública de Forsyth forma parte de un plan de apoyo logístico para varios condados de Carolina del Norte, que el gobernador Roy Cooper anunció la semana pasada.
Las funciones de apoyo de estos equipos incluyen administrar la vacuna, recoger datos, controlar la afluencia de personas y educarlas sobre la vacuna antes de que reciban la dosis, según explicaron desde el Departamento de Salud local.
“El personal de Salud Pública ha estado trabajando los siete días de la semana, excepto los días festivos, desde que recibieron el envío de la vacuna el 22 de diciembre”, dijeron las autoridades locales en un comunicado.
Hasta el domingo, se habían vacunado aproximadamente a 3,500 personas en Forsyth, entre trabajadores de la salud, personal de los centros de cuidado a largo plazo y personas de 75 años o más, quienes por el momento son los únicos grupos elegibles para recibir la inmunización.
“La respuesta ha sido abrumadora desde que Salud Pública empezó a atender citas para este grupo (personas de 75 años o más), recibiendo 50.000 llamadas en solo dos días y medio. La línea de citas está actualmente cerrada”, informaron.
Ante la gran afluencia y el colapso de las líneas, el personal de salud del condado ha cerrado la línea de citas y, en cambio, está llamando directamente a las personas que intentaron comunicarse con el Departamento de Salud anteriormente para pedir cita.
“Salud Pública informará al público cuando reabran las opciones de citas” indicaron y recordaron que no vacunarán a las personas que no tengan hayan programado una cita previa.