Roma, 6 jul (EFE).- El barco humanitario "Ocean Viking" ha entrado en el puerto de Porto Empedocle, en la isla de Sicilia, y espera instrucciones de las autoridades italianas para saber si los 180 migrantes rescatados en los últimos doce días que lleva a bordo serán trasladados a otra nave para guardar dos semanas de cuarentena por la crisis de la COVID-19.
"Después de un día de espera, el 'Ocean Viking' recibió instrucciones de la Capitanía para prepararse para ingresar a Porto Empedocle", escribió la ONG que gestiona el barco, SOS Méditerranée, en las redes sociales.
El barco ha permanecido todo el día en aguas de Sicilia, a la espera de recibir indicaciones por parte de Italia, después de haber rescatado desde el 25 de junio en cuatro operaciones a un total de 180 migrantes, entre ellos veinticinco menores y una mujer embarazada.
Los medios italianos aseguran que en las próximas horas los migrantes subirán a autobuses que les recogerán en la bodega del "Ocean Viking" y les trasladarán directamente a la bodega de la embarcación italiana "Moby Zazà", ya atracada en Porto Empedocle y en la que permanecerán durante dos semanas debido a la pandemia de coronavirus.
De producirse de esta forma, las 180 personas rescatadas no pisarán en ningún momento el puerto.
El "Moby Zazà" ha desembarcado este lunes en Sicilia a 169 migrantes que estaban a bordo guardando cuarentena y que habían sido rescatados el mes pasado por la ONG alemana Sea Watch.
En la embarcación permanecerán treinta personas que dieron positivo en la COVID-19 y que estarán aisladas en cubierta, en una "zona roja", mientras que el resto del barco se ha desinfectado para permitir la entrada de los 180 migrantes del "Ocean Viking".
En el mar Mediterráneo esperan otros 52 migrantes, rescatados en los últimos días por el mercante "Talia", que actualmente se encuentra en aguas maltesas hasta que se le permita desembarcarlos en algún puerto.
Están a bordo en una situación infrahumana ya que el barco, dedicado al transporte de ganado, no reúne las mínimas condiciones para alojar a estas personas, por lo que su capitán, Mohammad Shaaban, ha implorado a Malta e Italia que le asignen algún puerto.